↑ «Devin Booker, giannis antetokounmpo camiseta James Harden naemed Kia NBA Players of the Month». ↑ «Chris Paul Player of the Week». The Police: Ghost in the machine. La única vez que se inscribió un libanés fue en la campaña 1957-1958 y, en aquella ocasión, por incomparecencia, el UB Beirut fue superado por el sirio JS Alepo y así se resolvió la primera eliminatoria de la historia de esta competición. El estadounidense Joe Arlauckas tuvo el 15 de febrero de 1996 la mayor anotación individual de los últimos años de la máxima competición europea. Los búlgaros se convirtieron en Tánger en el equipo más encestador (172 puntos) y, de paso, establecieron la mayor diferencia en el marcador (119) en un partido de esta competición. La mayor parte de españoles, italianos, griegos y franceses tomaron parte por la Euroleague, mientras que la mayoría de rusos, israelíes y del este de Europa optaron por la Suproliga. Dicha comisión trasladó la propuesta a sus respectivas federaciones en lo que iba a ser inicialmente una competición entre seis clubes, pero debido a la magnitud y repercusión del evento se amplió al resto de estamentos con la idea de enviar cada una a sus respectivos campeones de liga para competir por el título de mejor club de Europa.
El Fortín triunfó en los últimos seis encuentros y consiguió el liderazgo, sumado al declive de Boca. A pesar de que muchos pensaban que el Fortín era el principal candidato a quedar eliminado, Vélez ganó la zona con total autoridad, clasificándose como cabeza de grupo. La primera de ellas es la que protagonizaron el ASK Riga y el BC Akademik en 1959. En la capital búlgara, Sofía, el estadio de fútbol Vasil Levski (acondicionado con una superficie desmontable de madera) congregó a cerca de 20.000 espectadores para presenciar el partido de vuelta, que terminó con una ajustada victoria de los letones por 67 a 69. No obstante, a pesar del ambiente adverso, la diferencia de 21 puntos conseguida en el de ida por los entonces soviéticos ya les había asegurado prácticamente el título. En la vuelta, y a pesar de la lesión a último momento de Víctor Sotomayor, un baluarte de la zaga, Bianchi se plantó con cinco defensores y forzó los penales, en los cuales Chilavert fue figura atajando uno. Tras ser electo como entrenador del año en Sudamérica, Bianchi continuó al mando del plantel argentino en busca de expandir la gloria del club. Tuvo un gran inicio en el Clausura 1995, pero luego de perder la Recopa Sudamericana contra Independiente, sumado al desgaste de viajar de nuevo a Japón, cansó al equipo y acabó nuevamente 3.º. Para la temporada 1995/96, Bianchi ficha a Marcelo Herrera de Gimnasia y Tiro de Salta y afianza a varios canteranos como Claudio Husain o Fernando Pandolfi para fortalecer al equipo.
En el primer tiempo, Niza ya ganaba 4 a 0. En el entretiempo, Bianchi advirtió al equipo que debía continuar atacando ya que todavía no estaba asegurada la clasificación. Mismos acontecimientos se sucedieron en la tercera final del equipo soviético, jugando esta vez contra sus compatriotas del Basketbol’nyy Klub Dinamo de la ciudad de Tiflis en la que vencieron por un global de 170-152. La competición mostraba desde sus inicios un fuerte dominio de los equipos de la Europa del Este, y en especial de la Unión Soviética, circunstancia que no varió en las siguientes tres temporadas. McDonough Gymnasium. Es un pabellón para 2500 espectadores donde juega el equipo femenino de baloncesto, alguno durante la temporada el masculino, además de los equipos de voleibol. Las últimas cuatro fechas, dirigidas por Osvaldo Piazza, coronaron a Vélez como el primer equipo bicampeón en la historia de los torneos cortos, y el sexto y último título de la estadía de Bianchi en Liniers. En la ida, el Niza perdió 3-1. En la vuelta, Bianchi preparó a un habilidoso extremo yugoslavo llamado Milos Djelmas, quien contaba con muy pocos minutos en la temporada, para jugar el partido de vuelta.
Hasta 1965, la final también se disputaba a doble partido -con la excepción de la edición de 1962, y 1963, donde hubo un tercer partido de desempate-, y desde 1966 se hacía a partido único, con la particularidad de que en esa misma edición y en la siguiente el formato para decidir el campeón fue el de final entre cuatro o final four, fórmula recuperada 21 años después. En la temporada 1964-1965, los norirlandeses del Celtic de Belfast FC le encestaron solo 17 puntos (5 en la primera parte) al Ípróttafélag Reykjavíkur en el partido de ida de los dieciseisavos de final. El partido de la Copa de Europa que más puntos anotados registró fue el Racing de Malinas – Boroughmuir BC, correspondiente a la vuelta de los dieciseisavos de final de la temporada 1969-1970. Entre belgas y escoceses lograron encestar 264 puntos en 40 minutos de juego y el vencedor fue el Racing de Malinas (144-120). Al estar prácticamente resuelta la eliminatoria tras el partido de ida disputado en Edimburgo (84-123), ambos equipos no se aplicaron en defensa para volcar sus energías en el ataque durante la primera mitad. El serbio Radivoj Korać encestó 99 de los 155 puntos que le endosó el OKK Belgrado al sueco Alvik BK en la temporada 1964-1965. Con esta productividad anotadora, el OKK remontó una eliminatoria que tenía cuesta arriba al tener que remontar una desventaja de 46 puntos y Korać entró en la historia de la Copa de Europa al ser el jugador más encestador en un solo partido.